ERGONOMIA ARTICULAR

Recomendaciones generales sobre ergonomía articular

  • Respetar el dolor. Parar cuando sea necesario y descansar. Aprovechando los momentos en los que la medicación este realizando su efecto.
  • Evitar permanecer en una misma posición durante un periodo de tiempo.
  • La posición debe ser estable y con una buena postura. Evitar siempre posiciones que puedan producir deformidad. Las articulaciones se suelen deformar cuando están en flexión, por ello es mejor mantener las articulaciones extendidas. Por ejemplo: no es bueno sujetar la cabeza con los dedos flexionados, ya que con el tiempo se pueden originar deformidades.
  • Mantener alineados los segmentos corporales. Cuando se esté de pie, permanecer con los dos pies apoyados, evitar estar mucho tiempo en pie.
  • Cuando se camine dar los pasos iguales con las dos piernas y no pasos muy largos.
  • En la cama, la tendencia cuando hay dolor es tomar una postura en flexión, esto no es bueno. Es mejor tener las articulaciones extendidas o semi-flexionadas, siempre y cuando se cambie a menudo de posición.

La cama no debe ser ni muy blanda ni muy baja.

  • Evitar asientos bajos. El respaldo y los asientos tienen que ser firmes. Cuando se esté sentado los pies deben estar siempre apoyados en el suelo o sobre en un banquillo.
  • Si se está realizando alguna tarea sentado, el respaldo de la silla de trabajo debe llegar hasta la parte media de la espalda.

Se debe prestar especial atención a la altura de la superficie de trabajo, ésta no ha estar ni muy alta ni muy baja. La posición correcta al estar sentado es mantenerse recto y con los hombros relajados.

  •  Al levantarse de una silla o sillón colocar las palmas de las manos a los lados (es preferible sentarse en una silla con reposabrazos), inclinarse hacia delante y empujar con las palmas de las manos e incorporarse.
  • Utilizar las articulaciones más fuertes y los músculos más largos:
  • Flexionar las rodillas y la cadera para levantar algún objeto.
  • Utilizar los hombros y caderas suavemente para abrir puertas.
  • Utilizar los pies para cerrar cajones.
  • Llevar el bolso y transportar objetos  sobre el antebrazo.
  • Evitar coger objetos pequeños o que requieran un fuerte agarre.
  • Repartir el peso y utilizar las dos manos para trabajar, coger y trasladar objetos realizando movimientos rítmicos y suaves.
  • Para realizar actividades como abrir frascos o limpiar superficies alternar las manos o utilizar las dos para aumentar la fuerza.
  • Utilizar las palmas de las manos en lugar de los dedos.
  • Transportar los objetos en un carrito, tanto en casa como en la calle

Fuente: Guía de terapia ocupacional para personas con artritis reumatoide, AMAPAR